Los disc-jockeys que amenizan las noches de fiesta del restaurante y club Marina Beach, uno de los locales de moda ubicado junto al puerto de Valencia, crean su música desde una cabina de DJ fabricada por Pauferro.
De casi cinco metros de diámetro y dos metros de altura, esta cabina sencilla visualmente, pero de gran complejidad técnica, ha sido diseñada específicamente para salvar el desnivel entre la zona que ocupa el DJ y la pista de baile.
El mostrador sobre el que se instalan los equipos de música del DJ tiene una altura de unos 90 centímetros, para acomodar el trabajo del pinchadiscos. Una cabina que resulta ergonómica para el DJ, muy representativa del entorno en el que está y muy impactante desde el punto de vista de quienes se encuentren en la pista de baile.
El revestimiento exterior de la cabina, con su alistonado en relieve, está creado a partir de piedra acrílica – solid surface – de Krion, al que se añadieron los logotipos de Marina Beach y otras marcas patrocinadoras.
El interior de la cabina se compone de armarios de laminado compacto, con piedra acrílica y mármol en la parte superior. En todo momento, se optó por materiales con cualidades específicas para el aire libre, que mantienen sus cualidades inalterables en espacios exteriores, ya sea en ambientes húmedos o ante posibles cambios meteorológicos.
En este proyecto, colaboramos con el estudio Janfri&Ranchal, para configurar soluciones que respondieran específicamente a las necesidades de uso del proyecto y a las condiciones de la terraza al aire libre.
En ese sentido, la cabina de Marina Beach permite acomodar todo tipo de equipos eléctricos, gracias a la sucesión de conexión eléctricas con que se ha equipado, y cuenta con una salida de caños de vapor que permite crear efectos especiales durante las sesiones musicales.
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